Debate sobre el papel de la industria en la recuperación de la competitividad europea
Una charla digital organizada por DIPLOCAT busca el intercambio de buenas prácticas entre actores internacionales, regionales i locales
El 15 de septiembre de 2022, DIPLOCAT acogió un debate online en lengua inglesa sobre "El papel de la industria en la recuperación de la competitividad europea". El objetivo de esta charla digital era la promoción y el intercambio de buenas prácticas entre actores internacionales, regionales y locales. En esta ocasión, el debate lo había propuesto un miembro del grupo de trabajo empresarial, social y sindical de DIPLOCAT.
El debate se centró en cómo el cierre de fronteras y el bloqueo de la cadena de suministro de productos esenciales provocado por la Covid-19 primero y ahora por la guerra en Ucrania, ha perturbado la economía de la UE y la global. Como resultado, la propia noción de industria está en transformación hoy.
Vídeo en inglés:
Laura Foraster i Lloret, secretaria general de DIPLOCAT y moderadora de la sesión, dio la bienvenida al público asistente y agradeció la participación de los ponentes en el debate. A continuación, hizo una breve introducción del papel de DIPLOCAT y destacó cómo estos debates son una experiencia muy enriquecedora para compartir conocimientos y prácticas de éxito entre actores internacionales sobre estrategias a seguir. Ante este nuevo panorama industrial, Foraster dijo que la cuestión que guiaría el debate sería cómo Europa puede implementar y aprovechar unos cambios que son altamente necesarios.
Clotilde Barbot, jefe del departamento de "Partenariado y Dispositivos" de la región francesa de Auvernia-Ródano-Alpes, hablando de las oportunidades que presenta la relocalización y por qué las empresas deberían trasladarse a Europa, hizo una breve introducción sobre cómo una región como la suya presenta sus atractivos para que las empresas se trasladen. Barbot explicó que Auvernia-Ródano-Alpes se caracteriza por su dinamismo, los grandes espacios urbanos e industriales, y los centros de ingeniería. Además, la adopción de una nueva estrategia industrial para el período post-covid 2022-2028, similar a planes adoptados por otras administraciones públicas a nivel mundial, se ha convertido en una medida esencial. De hecho, el plan ofrece un conjunto de herramientas de asistencia técnica y económica necesaria para la relocalización, dirigidas a las empresas, especialmente a las pertenecientes a sectores de excelencia como la sanidad, el hidrógeno y la microelectrónica.
Natàlia Mas Guix, directora general de Industria de la Generalitat de Cataluña, destacó en primer lugar las similitudes y la estrecha relación entre Cataluña y Auvernia-Ródano-Alpes, ya que ambas son miembros de la red Cuatro Motores de Europa . Mas también manifestó que, de forma similar a la citada región, Cataluña ha aprobado recientemente el Pacto Nacional de la Industria para el periodo 2022-2025, aprobado con un amplio consenso de los agentes económicos y sociales. Este plan pretende cumplir tres principales objetivos: conseguir una economía más eficiente, hacer del pacto industrial una herramienta para acelerar la doble transición digital y verde y, finalmente, recuperar la autonomía industrial estratégica. Por su parte, y respondiendo a la misma pregunta, Mas aseguró que en algunas ocasiones se ha confundido relocalización con proteccionismo. En cambio, defendió que la relocalización no significa llevarlo todo a casa y limitar la presencia global. La relocalización pretende conseguir una mayor resiliencia, diversificación y proximidad económica para consolidar la competitividad global y, muy importante, conseguir una sociedad más equitativa.
Cabe destacar que, en este contexto de relocalización, los Fondos Next Generation tienen y tendrán un papel fundamental. Los resultados en Cataluña han sido positivos y, de hecho, el papel de la industria en la economía ha crecido por vez primera en 40 años. De la misma forma, se han materializado grandes proyectos, por ejemplo, en el ámbito de las baterías eléctricas y componentes de baterías, así como en el ámbito de los semiconductores, ambos fundamentales para los procesos industriales actuales. Sin embargo, merece la pena mencionar que para que esta estrategia industrial se pueda implementar correctamente y alcanzar los resultados esperados, es necesario que los territorios tengan las condiciones adecuadas en cuanto a los estándares de funcionamiento, la educación y sobre todo las infraestructuras. Sobre este último punto, Natàlia Mas señaló que es necesario mejorar las infraestructuras existentes y finalizar la construcción del corredor ferroviario mediterráneo, ya que es un factor clave para la recuperación industrial de Cataluña y Europa.
Karina Azar, analista económica de Fomento del Trabajo Nacional, admitió que la relocalización puede tener consecuencias negativas para los consumidores, tales como el aumento de costes y la falta de innovación. Afirmó que el concepto no es nuevo, pero hasta la fecha ha sido objeto de debate por parte de especialistas de todo el mundo. Incluso si la relocalización puede tener algunas consecuencias negativas, como también señalaron los demás ponentes, esta estrategia implica ganancias en eficiencia, resiliencia y seguridad tanto para los consumidores como para las empresas, y una buena implementación seguro supera los costes. Además, Azar señaló algunos puntos sobre la relocalización a tener en cuenta. En primer lugar, existe el riesgo de exposición de determinadas materias primas y productos a choques económicos, que pueden hacer que Cataluña sea dependiente del exterior. En segundo lugar, no deberían relocalizarse todos los sectores y se pueden considerar otras estrategias diversificando las cadenas de valor globales y mejorando la preparación o previendo amenazas potenciales. Según Azar, en determinados casos, una estrategia de relocalización es un paso necesario para impulsar la actividad industrial y atraer inversión extranjera directa.
En la parte final del debate se destacó la velocidad de los cambios en el mundo actual, con acontecimientos inesperados como la pandemia de la Covid-19 y la invasión de Ucrania por parte de Rusia, que añaden un plus de incertidumbre. De cara al futuro, se manifestó la necesidad de una mayor adaptabilidad, cooperación y previsión para afrontar mejor los retos por venir. De la misma forma, se detecta una tendencia positiva, que es el diálogo continuo entre actores, especialmente entre empresas, administraciones y entidades sociales, ya que los retos globales sólo podrán superarse trabajando conjuntamente.